El sacerdote católico Jerzy Popieluszko fue beatificado en 2010 por el Papa Benedicto XVI. El padre Popieluzko fue torturado y asesinado por la policía por apoyar al sindicato obrero «Solidaridad», que se había rebelado contra el régimen comunista polaco. Convertido en un mártir, su coraje y su fe arrastraron a muchos compatriotas que arriesgaron su vida en defensa de la libertady la dignidad humana. Para reprimir el movimiento, el gobierno polaco contó con la colaboración de los servicios de inteligencia soviéticos.
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En el día del sacerdote, podemos honrarlos y rezar por ellos, mirando un ejemplo no muy lejano. Su faceta política fue fruto del ejercicio de los valores humanos, sustentados en las virtudes que lo están llevando a los altares….
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