Muchas empresas poseen información valiosa que desean tener muy bien protegida. Esta información puede ser técnica (por ejemplo, el diseño de un nuevo chip o nuevo software), comercial (por ejemplo, estudios de la competencia o planes de marketing), financiera (por ejemplo, planes para una oferta de acciones), legal (por ejemplo, documentos sobre la posible fusión o absorción de una empresa), y de muchos otros tipos. Con frecuencia, para proteger esta información se pone un guardia uniformado a la entrada del edificio, que asegura la adecuada identificación de todo el que entre. Asimismo, los archiveros y las oficinas se cierran con llave para asegurar que sólo las personas autorizadas tengan acceso a la información.
RESPECTO DEL PROBLEMA DE LOS INTRUSOS, SE LOS PUEDE
CLASIFICAR COMO:
- PASIVOS: SOLO DESEAN LEER ARCHIVOS QUE NO ESTÁN AUTORIZADOS A LEER.
- ACTIVOS: DESEAN HACER CAMBIOS NO AUTORIZADOS A LOS DATOS.